OPINIÓN. "Empezando a analizar las PASO"

Las urnas no se han enfriado aún. La economía esta explotada.

No obstante, vale la pena empezar a analizar lo que dejaron las PASO por cuanto implica definir  el proyecto de país que queremos. A nivel local/provincial, Juntos por el Cambio, de la mano de la llamada “boleta de Trenque”, alcanzo aprox. el 50 % de votos. 

Las figuras de Francisco como Intendente, Valentín como diputado provincial y Miguel como vicegobernador traccionaron y sumaron un respaldo y adhesión muy importante. 

Ello es un claro mensaje de que, cuando los políticos hacen “buena política”, tienen su reconocimiento. Hay que trabajar para que el mensaje sea ratificado en octubre.

Ahora bien, me gustaría enfocarme en el tema Milei, la sorpresa de estas PASO. 

Personalmente aclaro que no simpatizo con él en absoluto. Especialmente no adhiero a sus modos autoritarios -de los que tanto conocemos en nuestro país-. 

Sin embargo, entiendo que a Milei no hay que discutirlo. Como espacio político, tenemos -y debemos- ser mejores. En el fondo y en la forma. La gente se expresó, y hay que tratar de comprender que quiso expresar, qué nos está diciendo el pueblo con su voto.

Entiendo que pudo haber algo de voto emocional con bronca. Pero además del voto bronca, me parece que la gente se hartó del populismo. Se hartó del estado que entorpece, que mete palos en la rueda. No solo se hartó de un estado que no resuelve, sino de un estado que jode la vida. Se hartó de que se hablen de “derechos”, cuando en realidad son “derechos” que NO se cumplen, que son RELATO, que sólo quedan en el papel o el discurso.  Se hartó de ese estado que acumula y acumula capas y capas de militantes que arancelan su militancia. 

A nivel nacional, y haciendo autocrítica desde el espacio que ocupo, pienso que Juntos por el Cambio tuvo una interna con peleas evitables, que mostraron lejanía con lo que estaba viviendo la gente. Lejanía que, con ese hartazgo, se vió reflejado en las elecciones del último domingo.

De todas maneras, creo que Juntos por el Cambio tiene que salir a jugar el partido con todo. Porque tiene con qué jugarlo.

Es el espacio opositor que va a gobernar entre 8 y 10 provincias a partir de diciembre. Va a ser el principal bloque en el congreso, y es el espacio que presentó una alternativa frente a un peronismo desgastado y le puso un freno al kirchnerismo cuando quiso cruzar los límites de la república.  

Además, Juntos por el Cambio es un espacio que adhiere a un Estado ordenado, austero, con libertad económica, equilibrio fiscal. Un Estado en el que se luche contra las mafias, se disminuyan las trabas burocráticas, se cobren menos impuestos, se modernicen las normas laborales, entre otros tantos pilares….

¿Que lo diferencia de Milei? La experiencia. 

Juntos por el Cambio, tiene experiencia en gestionar. Fue oposición, pero también gobierno. Con errores. Si. Pero también con muchos aciertos. Yademás fue el único gobierno no peronista en cumplir su mandato.

No es solo tener las ideas, sino que hay que tener la capacidad de implementar y gestionar los cambios. 

 Juntos por el Cambio tiene que mostrar sus EQUIPOS y sus PROPUESTAS. Tiene que ser una propuesta superadora de las otras. Tiene que mostrar una idea de construcción colectiva de país. Y contraponer esa idea con la idea del líder mesiánico autoritario que nos salva por arte de magia. 

Es cierto que sobran ministerios, pero yo estoy muy conforme con que mis impuestos vayan a la escuela pública. Yo estoy de acuerdo con un Banco Central independiente, y en una urgente reducción de la inflación. Pero no estoy de acuerdo, en “dinamitarlo” y perder nuestra independencia y soberanía monetaria. 

No me banco la casta, pero estoy seguro que no todos los políticos son iguales.

Tenemos que debatir cada una de las ideas. Para salir del populismo, tenemos que hacer mejor política. Tenemos que proponer algo mejor.